¡Hoy vivimos una tarde llena de emociones!
Esta tarde fue en su honor, estuvo repleta de gratitud y agradecimiento… hoy fue su última jornada laboral y nos llenamos de orgullo por haber formado parte de su vida por más de 40 años.
Estamos orgullosos de su camino recorrido, aunque no podemos negar que con sentimientos encontrados; hoy es momento de guardar los plumones, libros y cuadernos, y de comenzar su merecido descanso.
Querido tio Robinson, la comunidad del Liceo Elvira Sánchez de Garcés reconoce su trayectoria y gran entrega a la educación y le desea lo mejor en su nuevo camino.
Un fuerte abrazo y nuestros mejores deseos… gracias por tanto.